MARTÍN RAMIREZ / pinturas

Martín Ramírez,  mexicano, diagnosticado con esquizofrenia y encerrado en un hospital psiquiátrico durante los últimos 30 años de su vida. Nació en los Altos de Jalisco en 1895, en 1925 emigró a EEUU en busca de trabajo en el ferrocarril. Con la Gran Depresión, Martín quedó desempleado, solo y en las calles. El pasaje de la indigencia a la locura fue casi inmediato.

La producción de sus dibujos se llevó a cabo en este largo periodo en el hospital. Dibujaba debajo de las mesas sobre cualquier papel que cayera en sus manos, y con lo que encontrara en el suelo; lápices, dulces, comida.

Martín Ramirez es un típico caso de lo que con el tiempo se ha dado en llamar un "artista bruto o salvaje". Nunca pensó que estaba haciendo arte; tuvo que construir todo un mundo paralelo, una fuga, una realidad llena de íconos, hacer imágenes fuertes que refractaran su vida y sus emociones. Su iconografía está llena de animales, vírgenes, hombres charros, ferrocarriles, automóviles, guerreros villistas y zapatistas, diosas que transitan por espacios casi metafísicos que resuenan a teatros. Ciudades-escenarios.

Los primeros 15 años, que estuvo recluído no hacían mucho caso de sus dibujos, y los enviaban a sus familiares. Como hubo una epidemia de tuberculosis en el hospital donde él vivía, sus dibujos fueron quemados por temor al contagio. Fue hasta que Tarmo Pasto -un profesor de psicología y arte- lo encontró, fue el primero que lo tomó en serio y lo motivó a seguir dibujando. Sus dibujos se exhibieron dentro del hospital y en museos locales.

Martín murió en 1963. En 2007 se hizo una gran recopilación de sus obras en el Folk Art Museum de Nueva York y tuvo tal éxito que tres años después fueron llevadas al Reina Sofía, en Madrid. Esta fue la primera vez que se expuso en Europa, y con esto se consagró irreversiblemente en el mundo del ARTE, de galerías, museos y multimillonarios coleccionistas.